
Las Montañas
Hace poco subí al monte, y buscando unos mapas encontré estas líneas en un borrador de mis tiempos universitarios.
Hace poco subí al monte, y buscando unos mapas encontré estas líneas en un borrador de mis tiempos universitarios.
Poema dedicado a uno de esos amores profundos, bellos, secretos e inconclusos que uno sufre cuando es tonto.
Unas líneas rápidas sobre mi advocación favorita: la Virgen de las Nieves, protectora de Granada.
Oración que escribí hace ya unas navidades, y que en varias ocasiones he estado tentado de modificar; pero fueron fruto de un rato ante el belén, por lo que así quedarán estas líneas.
Estas líneas las escribí en la mañana del Domingo de Resurrección del año pasado. Salieron de mis dedos sobre la marcha, en una corta cadena de tuits. Son ridículas comparadas con todas esas cosas bonitas que se leen estos días; pero son mías, y para Él. Feliz culpa. Feliz Pascua.
Empieza la primavera. Y con ella, lo que es Primavera.
No se puede estudiar delante de una ventana cuando llueve. Ni cuando hace bueno. De hecho, no creo que se pueda estudiar con una ventana de por medio en ningún caso. Pero bueno, había que intentarlo.
No me apetece darle contexto. Debería estar durmiendo, pero la inspiración de las cosas tristes se presenta siempre como el dolor que las precede: sin avisar.
En TerraIgnota.es no usamos cookies propias pero si algunas de terceros. Puedes aceptar su uso o simplemente rechazarlo, es tu libre elección.
En Terra Ignota no usamos cookies propias pero si algunas de terceros. Puedes aceptar su uso o simplemente rechazarlo, es tu libre elección.